Materia para cuestionario 1
MATERIAL PARA CUESTIONARIO 1
“Y todos tus hijos serán enseñados por Jehová”.
(Isa. 54:13).
“Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón
y de toda tu alma y con todas tus fuerzas. Y
estas palabras que yo te mando hoy, estarán
sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos y
hablarás de ellas estando en tu casa y andando
por el camino y al acostarte y cuando te
levantes. Y las atarás como una señal en tu
mano y estarán como frontales entre tus ojos
y las escribirás en los postes de tu casa y en
tus puertas”. (Deut. 6:5-9).
“La obra de la redención debía restaurar en el hombre
la imagen de su Hacedor…este es el objeto de la
educación, el gran objeto de la vida”. (La Educación
pp.15,16).
“Restaurar en el hombre la imagen de su Hacedor,
hacerle volver a la perfección con que había sido
creado, promover el desarrollo del cuerpo, la mente
y el alma, a fin de que se llevase a cabo el propósito
divino de su creación. Este es el objeto de la educación,
el gran objeto de la vida.” (Ibid.)
“Cuando Adán salió de las manos del Creador, llevaba
en su naturaleza física, mental y espiritual, la
semejanza de su Hacedor.” (Id. p.15).
“El pecado mancilló y casi borró la semejanza
divina. Las facultades físicas del hombre se
debilitaron, su capacidad mental disminuyó,
su visión espiritual se oscureció..” (Id. p. 13)
Todo nuestro cuerpo se halla debilitado; el espíritu
y el corazón, debido al pecado. Por esta
razón, la educación cristiana debe ser triple y
tratar con el hombre todo. Tiene que educar
el corazón para que viva por la fe y por los
principios de un carácter bien fundamentado.
Tiene que desarrollar todas las facultades del
espíritu pues el diálogo con Dios es mediante
el Espíritu Santo(Jn. 4:22,24; Rom.8:9). Tiene
que educar el cuerpo en el trabajo útil y en la
vida, en armonía con los principios de salud.
Lea de nuevo el párrafo bajo el N° 3 y vea que la obra
de la verdadera educación es, mediante el espíritu
de Dios, restaurar la semejanza divina en el cuerpo,
en el espíritu y en el corazón; y desarrollar todas
las facultades o poderes naturales del cuerpo, de la
mente y del corazón. Los dos procesos de la educación
que tienen que operar juntos son: restauración
y desarrollo.
En su obra de educación el mundo procura solamente
desarrollar los poderes naturales. Omite la
restauración, que es el más importante de los dos
procesos. Ninguna educación que omita la obra de
restauración puede ser llamada cristiana. De ningún
niño que estudia en una escuela en la que no se cui-
de de la obra de la restauración espiritual, podrá decidirse
que está siendo “enseñado por Jehová”. Pero
la Biblia dice: “Y todos tus hijos serán enseñados
por Jehová.”
“En el sentido más elevado, la obra de la educación
y la de la redención, son una, pues tanto en la
educación como en la redención, “nadie puede poner
otro fundamento, fuera del que está ya puesto, el
cual es Jesucristo.”(Id.p.30).
“En todas nuestras iglesias debiera haber escuelas y
en éstas, maestros que sean misioneros.” (Consejos
para los Maestros, p.160)
Solamente en una escuela cristiana, dirigida
por un maestro con espíritu misionero, pueden
ejecutarse juntas, conforme al plan de Dios,
las obras de restauración y desarrollo.
“¿Quién puede señalar al miembro de una familia
que resultará eficiente en la obra de Dios? Debe
haber educación general para todos sus miembros
y todos nuestros jóvenes deben poder recibir las
bendiciones y los privilegios de una educación en
nuestras escuelas, a fin de que sean inspirados a
ser obreros juntamente con Dios”. (Id. pp. 43,44)
“Y todos tus hijos serán enseñados por Jehová y se
multiplicará la paz en tus hijos” (Isa.54:13)
“… y tu pleito yo lo defenderé y yo salvaré a
tus hijos” (Isa. 49:25).